“Siento que nuestra mejor oportunidad para lograr algo grande será en 2023″, dice Brad, y Jack, encantado con su vuelta a KTM.
Las KTM RC16 oficiales estarán esta temporada en manos de Brad Binder, que repite por cuarta vez en el box oficial de la fábrica austriaca, y de Jack Miller, que llega tras quedarse sin hueco en Ducati y como sustituto de Miguel Oliveira, que pilotará en 2023 una de las dos Aprilia oficiales. Desde su llegada a MotoGP, en 2017, KTM ha celebrado ya siete victorias, 18 podios y 3 poles, pero aún no ha podido ser un candidato serio a la pelea por el título. Ahora, con vistas a la temporada que arrancará el 26 de marzo de en Portugal, confían en poder hacerlo al fin con una pareja de pilotos que tiene tanta experiencia como casta, pero que hasta ahora ha pecado de irregularidad.
La definitiva explosión naranja podría llegar este año a tenor de las expectativas que han mostrado el sudafricano y el australiano en la presentación del Red Bull KTM Factory Racing. Ojo a las buenas vibraciones de Binder: “Ha sido un largo invierno así que estoy más que emocionado de volver a la pista y empezar de nuevo. Es mi cuarto año en la clase reina y siento que nuestra mejor oportunidad hasta ahora para lograr algo realmente grande será en 2023. Estamos listos para comenzar, así que vayamos a Sepang y veamos qué nos deparan esos primeros días de entrenamientos”.
Y en cuanto a Miller, dice: “¡Siento buenas sensaciones! Al unirme nuevamente a la familia KTM (corrió en Moto3 con la firma austriaca), ahora todo comienza a ser bastante ‘real’. He estado pensando en este momento durante bastante tiempo. Finalmente pude ver los colores de la KTM 2023 y a mí mismo con el mono y toda la preparación para la próxima temporada. Es increíble estar de vuelta en KTM y estar al día con todos los chicos. La presentación es una pequeña muestra especial antes de que nos pongamos manos a la obra en en el test de Malasia”.
Tanto uno como otro saben de sobra lo que es ganar carreras en MotoGP. Binder lo ha hecho en dos ocasiones y Miller en cuatro, dándose la circunstancia de que lo hizo tanto con Honda como con Ducati, por lo que de conseguir el triunfo también con la KTM sería el primer piloto de la parrilla actual capaz de conseguirlo con tres fábricas distintas. El que también puede hacer eso en cualquier momento es Maverick Viñales, que ya venció con Suzuki y Yamaha antes de intentarlo ya el año pasado con Aprilia, marca con la que también ha pisado el cajón. Será interensante ver si será Jackass o Mack el que lo consigue antes.
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